29 de setembre del 2019

Monasterio de Poblet


Trobada dels “AMICS DEL PARE MANYANET”

Aquest any… al Monestir de Poblet



Un cop més una colla de bons amics s’han trobat aquest any 2019.
El lloc,  el Monestir de Poblet, on s’ha fet una visita cultural i després gaudir d’un dinar a la Fonda Àngels de Montblanc.
Molt a explicar, riure , recordar i intercanviar.
En resum, moltes emocions.
I… a reveure








Visitar el Monasterio de Poblet (Tarragona)

El Monasterio de Poblet, ubicado en la comarca de la Conca de Barberà (Tarragona), es una de las abadías más importantes de Cataluña y de toda Europa. No en vano, fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1991. Aunque actualmente sigue siendo habitado por una comunidad de casi treinta monjes, buena parte de los espacios del enorme complejo monástico están abiertos al público.

Breve historia del Monasterio de Poblet

El Reial Monestir de Santa Maria de Poblet fue fundado en el 1150 por orden del conde Ramón Berenguer IV. Los primeros monjes en instalarse eran cistercienses y provenían de la abadía de Fontfroide, en Francia. El monasterio, que siempre contó con la protección de la Corona de Aragón y de importantes familias nobles, vivió su máximo apogeo tras construirse el Panteón Real (1340) por mandato de Pedro el Ceremonioso. Él mismo, y otros grandes reyes, yacen allí.
Con el declive de la Casa Real de Aragón, la pérdida de monjes y, especialmente, la desamortización de Mendizábal de 1835, el Monasterio cayó en el abandono y fue expoliado. Sin embargo, en 1940 un grupo de monjes cistercienses llegados de Italia recuperaron la vida monástica y lo hicieron resurgir (actualmente vive una comunidad de 25 monjes benedictinos). Reconstruido y protegido por la UNESCO, el Monasterio de Poblet es hoy un lugar de visita obligada en Cataluña.

Visita al Monasterio de Poblet

La visita al Monestir de Poblet puede realizarse de dos formas: por libre o en grupo guiado. Para la visita por libre se adquiere un folleto explicativo con mapa incluido disponible en varios idiomas. No hay audio-guías. En cuanto a las visitas con guía, se realizan en castellano o catalán en horarios variables, y tienen una duración de una hora.

Exterior

Desde la oficina de información (y venta de tickets) hay unos 200 m hasta la entrada principal del monasterio. En esta amplia recta ya se puede ver la inmensidad del conjunto. Antes de llegar a la fachada principal esta la Capilla de San Jorge (s.XV), la Puerta Dorada (s.XV) y la Capilla de Santa Catalina (1250), además de varios edificios más modernos, como la cafetería o la Hospedería de Poblet, espacio ocupado en otros tiempos por el hospital de pobres y peregrinos, del que solo se conserva el portal de acceso.
Desde la Plaza del Monasterio a mano derecha, el Palacio del Abad (s.XVIII), de estilo renacentista. Pero el protagonismo aquí es para la gran fachada del monasterio, formada por una muralla de 11 m, cuatro torres y la portada barroca de la iglesia (s.XVII).






Piso inferior

Las dos primeras salas que se visitan son dos enormes espacios abovedados que sirvieron como dormitorio y comedor para los hermanos conversos (o legos). Sin embargo, con la progresiva pérdida de esta figura en los monasterios, ambas salas fueron adaptadas como lagar y bodega respectivamente. No quedan elementos originales que recuerden esos tiempos, pero aún se puede observar en el suelo el canalón que transportaba el mosto de una sala a otra.

                                      

El recorrido prosigue por el claustro mayor, en torno al cual se organiza la vida monástica. Destaca el templete del lavabo (lavatorium) del s.XII, donde los monjes se lavaban las manos antes de comer.





Las galerías abovedadas y la zona ajardinada pueden recorrerse libremente y también se puede entrar en dos salas: la antigua cocina, que solo conserva el hogar y algunos objetos de exposición, y el calefactorio, una pequeña sala que servía para calentarse en los días más fríos.

                                        

Hay otras tres salas junto al claustro a las que no se puede acceder, pero que se pueden ver desde el umbral. La más impactante es el refectorio de los monjes, que sigue siendo el comedor principal del monasterio en nuestros días. También siguen en uso la sala capitular, donde los monjes se reúnen para leer los capítulos de la Regla de San Benito, y la biblioteca (antiguo scriptorium), su espacio de lectura, estudio y trabajo.

Piso superior

Un pequeño tramo de escaleras os llevará directamente al dormitorio de los monjes, uno de los más grandes del mundo (87 m de largo). Aunque está completamente vacío (o quizá por eso) es un lugar que impresiona.


El dormitorio está conectado con el sobreclaustro, una galería del desaparecido claustro superior. Se puede recorrer entero y es el sitio perfecto para admirar el campanario y el cimborrio de la iglesia, además de la zona del claustro inferior.



Iglesia

Desde el sobreclaustro hay que volver al dormitorio para llegar a la Iglesia mayor (s.XII). Allí os esperará la joya de la corona: el Panteón Real; un conjunto de tumbas de diferentes condes y reyes de la corona Catalano aragonesa. Construidos entre los siglos XIV y XV sobre dos arcos rebajados en la zona del crucero, los sepulcros reales de Poblet albergan los restos de Jaime I el Conquistador, Martín I el Humano, Pedro III el Ceremonioso, Alfonso V el Magnánimo, etc.

Finalizando ya la visita, no hay que olvidarse del enorme retablo renacentista de Damià Forment (s.XVI) realizado en alabastro, donde se puede ver la imagen de Santa María de Poblet, además de otros motivos religiosos clásicos. En esta zona sobresale el enorme órgano de 2012, construido por una importante firma suiza, y una capilla dedicada a una familia noble.



                                                  

18 de setembre del 2019

Praga, Wroclaw, Cracovia y Países bálticos


VERANO 2019, PAISES BÁLTICOS.
 NÚREMBERG, PRAGA, BRESLAVIA Y CRACOVIA.

11 de agosto a las 12h 23 min   
                                 
 Feli, Núria y Mª Carme
 Con 27.205 Kilómetros  

                                                                           

Salimos de Terrassa con una buena temperatura, hace calor, pero entre el ventilador y una toalla húmeda vamos cruzando esa Francia que tanto temo. Cuando llegamos cerca del Rhone la temperatura baja considerablemente.
Es hora de hacer noche, paramos en área de Tournon s-Rhone, pasado Valence a 100kms de Lyon.
Pueblo encantador, gran plaza y el rio a tocar, bonitas vistas.
Llueve un poquito por la noche lo que yo agradezco muchísimo.





Coordenadas: N 45.07366, E 4.82111
                        N 45°04'25", E 4°49'16"


Kilómetros 27.763

12 de agosto, Núremberg

Después de una tranquila noche, arrancamos y hoy kilómetros todo el día.

Calculando, creo interesante hacer noche en Núremberg, sería bueno y a poder ser dar un paseo, va muy bien después de tantos kilómetros sentados.
Pues sí buen cálculo, paramos en un aparcamiento muy cerca de la ciudad, nada de especial y cerca de la estación. Cenamos y ¡hala! a visitar Núremberg de noche; la conocíamos de día, pero en versión nocturna también es muy bonita, dimos un buen paseo, hicimos rodar la anilla de la fuente, pedimos deseos, hicimos fotos de los lugares más importantes y así hasta volver a la autocaravana, que con el fresquito se duerme estupendamente.

En la II Guerra Mundial, la ciudad pasó de la gloria a las cenizas, siendo herida de muerte con más de un 90% de su territorio devastado por la crueldad de las bombas. Pero como si fuera el Ave Fénix, desplegó sus alas doloridas para cicatrizar sus muchas heridas y erigirse de nuevo como una de las ciudades más hermosas y atractivas en territorio germano.

                                        Iglesia de las mujeres


Iglesia de San Lorenzo 


                                      Hospital del Espíritu Santo

                                        

     

Plaza del mercado central


  Fuente hermosa

             


          


                              
            
                                                     

¡¡¡¡¡Qué bonita es Núremberg!!!!!

Coordenadas: N 49.443706
                     E 11.071668

Kilómetros 28.645

13 de agosto, Praga

Despertador, desayuno, cocina limpia, duchas y en marcha dirección Praga.
Justo al pasar la frontera ya dan aviso que se necesita viñeta, nosotros la compramos al poner gasóleo en la gasolinera anterior, seguimos la ruta y como aparcar en Praga es un poco complicado fuimos directamente a la calle Troja, donde se encuentran todos los "campings", esta vez fuimos al Sokol Troja, es grande y sobre todo con buenas instalaciones sanitarias, estos "campings" acostumbran a ser jardines de chalets particulares donde adaptan unos servicios y ya está, por el contrario este se veía muy bien.
Ya aparcados nos informan del modo de ir al centro, es un tranvía, tiene parada cerca y puedes sacar billete pagando con tarjeta, la maquinita es de color naranja.
Praga es la capital de la República Checa también conocida como La Ciudad de las Cien Torres o La Ciudad Dorada.
Praga es una ciudad medieval cuyo centro histórico encierra rincones “de cuento”. Sus calles, sus puentes siempre llenos de turistas, le dan un toque muy especial.
Distribuimos las visitas y pensamos que cara al fresco sería interesante subir al Castillo de Praga, se eleva en un monte que domina la Ciudad Vieja desde el otro lado del río. Accedimos a él por unas escaleras, un buen montón de escaleras, hasta llegar a una gran plaza desde donde accedes al castillo.

                                             
                                            La puerta de Matias.

              
                                               Catedral de San Vito

              


                                       La estatua de San Jorge.

                               

                                            Palacio Real Viejo.



La Torre Petrin


                       Torre de Televisión con esculturas de bebés que gatean 


                                      Vista desde el Castillo


                                                            Callejón del Oro

                               

El castillo es un recinto amurallado que incluye iglesias, monasterios, museos y la Catedral. Muy impresionante ya que parece que estas en una ciudad con sus plazas, sus callejuelas, todo muy bonito.





                                       Iglesia de San Nicolás

 

Seguidamente nos acercamos al Monasterio de Loreto y ya vamos descendiendo entre escaleras y callejuelas.


                              

                                 

Buscamos una pizzería con opción vegana donde poder cenar y reponer fuerzas, mientras nos interesa que vaya anocheciendo de ese modo poder visitar Praga de noche.
Recorremos el Puente de Carlos hacia la plaza del ayuntamiento. Todo de noche un espectáculo. Turistas por todas partes, fotos y más fotos.





Satisfechos y cansados vamos a buscar nuestro tranvía  que nos acerca hacia el camping.

Coordenadas: 50°07'00.8"N 
                        14°25'30.0"E

Kilómetros 28.946

14 de agosto Praga

Hoy preparados para conquistar Praga, el día se presenta caluroso y pienso calzar sandalias, ya estamos camino del tranvía cuando doy un giro de pie y pienso… no, no voy bien, retrocedemos a la autocaravana y buenas deportivas, caminar por Praga no es tarea fácil, mucho adoquín y además desnivelados. 

                                          
Bien calzada y allá que vamos.

Básicamente nos dedicamos a patear rincones ya visitados y añadir novedades.


                               El Barrio Judío, Sinagoga Viejonueva.

                                   



                                       


                                        Monumento a Jan Hus

                                      
                                                                     
                                                               Torre de la pólvora

                                               
                                             Nuestra Señora del Tyn

                                               

                                                                         Museo Cubista  

                                              

                                                         La plaza de la Ciudad Vieja

                                    








                                          Ayuntamiento y El Reloj Astrológico






                                                                       Rudolfinum

                                          


                                                                   Galería Nacional

                                           

                                                 Mercadillo e Iglesia de San Galo






                                   

                                              Casa danzante


                                                                   






Puente de Carlos, este puente en otras ocasiones que he visitado esta maravillosa ciudad, yo veía el suelo, esta vez estaba tan repleto de gente que iba y venía que con dificultad se veían las numerosas estatuas que están en él. Muchísima gente. Se concentran músicos, artistas callejeros y vendedores ambulantes. Todo lo hace aún más encantador.
A mí personalmente Praga me transmite unas vibraciones y si miro su cielo lo veo de un color diferente, tiene unas tonalidades entre malva y violeta que lo hacen especial.

                                 
Seguimos dando vueltas por la ciudad, comemos y ya es hora de bajar la mirada a los comercios y tiendas, las joyerías con sus “granates” típicos deslumbran con su destello. El granate de Bohemia es una piedra preciosa que está presente de manera natural en el territorio de la República Checa y cuya historia se remonta a la Edad Media.

                            
Junto con el cristal de Bohemia, forma parte de los souvenirs más tradicionales del país.

                              

También la “moldavita”, hace muchos años un meteorito cayó por la zona y justo donde impactó quedó esa roca afectada, siendo un material muy preciado, con el que se hacen preciosas joyas.



Matriuscas, juguetes de madera

                             

                          

y algo, muy rico para comer, se llama Trdelník, es un pastel tradicional de Eslovaquia-Moravia.
Se trata de una masa de harina enrollada en un pincho de madera y que se asa al fuego de unas brasas mientras que gira sobre sí mismo.
En años anteriores solo los había en puestos ambulantes, ahora los han comercializado enseñando como los hacen y luego los rellenan de frutas, helados, o bien salado. Nosotros no pudimos resistir la tentación y comimos uno de helado. La verdad estaba superdelicioso.

                                         

Por la tarde cayó un chaparrón, de poca duración lo que hizo del cielo de Praga un mayor espectáculo de color.


                                                                           

Realmente, el tiempo pasa.

    

Sentados, cerca del río Moldava, admiramos los altos picos de las torres y el ir y venir de los turistas.


                                        

                                        

                                        

                                       

            

                                       

Llegó la hora de despedirnos de nuestra querida Praga y como siempre le dije, ¡¡hasta otra!!


                                                                             
                                                                    

Esperamos nuestro tranvía y hacia el camping.

15 de agosto Polonia


Hoy salimos de Praga, hay bastante cola para llenar y vaciar, pero no hay prisa puesto que estamos de vacaciones, así que, esperamos nuestro turno.

Destino Wroclaw, Breslavia en nuestro idioma. ¿Y por qué esta ciudad? Pues en uno de los viajes que leí en Internet, decían quiénes visitaron la ciudad, que era muy bonita y sorprendente, así que, fuimos a comprobarlo.

Aparcamos en un Aparcamiento en el que se podía hacer noche, muy cerca de la ciudad.
Aquí ya tuvimos algún "problemilla", a la hora de sacar el ticket la máquina pedía monedas, cosa que no teníamos ya que el euro en Polonia no existe, y la tarjeta… no la leía, Feli y Núria se la enseñaban y la volvían a enseñar, pero la máquina ni caso. Decidieron ir a cambiar, muy cerca había unos grandes almacenes así que yo me quedé en la autocaravana y ellos se fueron. Tardaba en regresar, yo empecé a preocuparme, al fin llegaron sofocados, resulta que el día 15 de agosto es Fiesta oficial y todo está cerrado. Tuvieron que encontrar un cajero de un banco y por fin cambiar. Y ahora, la risa, ellos bien equipados con monedas cuando ven como el caballero de enfrente mete la tarjeta en la ¡¡¡¡ranura!!!!!
Mi familia es muy moderna y pensaban que la tarjeta era leída por escáner. Ja ja ja... una anécdota.

Leí que en esta ciudad hay repartidos unas 200 figuritas gnomo, pequeñas, de bronce, están en diferentes lugares y tienen relación con el lugar en donde se hallan situados, así pues, en el cajero está el gnomo con dinero, en la heladería, uno comiendo helado, y repartidos por toda la ciudad, yo que soy muy infantil, debido a mi profesión me agache para retratar todos los que pillaba, que divertido, mi hija la verdad estaba un poco preocupada por si tenía el síndrome de Peter Pan, pero yo me lo pasaba muy bien, además buen ejercicio físico, agáchate, medio estirada, levántate, vuelve a agachar… Muy bueno.

En el punto de información te venden el mapa donde están posicionados y una hoja con pegatinas para llevar la cuenta de los gnomos encontrados, sin dudarlo ni un instante yo me compré un folleto. Jajaja.

Así entretenidos hasta llegar a una gran plaza, con unos edificios preciosos, un ambiente excelente, todo, todo, era muy hermoso.
Recorrimos buena parte de la ciudad y la verdad nos encantó, y sin perder el ritmo íbamos descubriendo gnomos. ¡Han quedado unos cuantos, por hallar, habrá que volver! 

                               La plaza del mercado y el Ayuntamiento, 
                                         Rynek, la plaza principal.

                              

                                 

                                               

                                              

                                              

                                              

                                                   

                                               


                                       El modernista Art Café Kalambur

                                                       

                                              La Catedral y su isla

                                             

                            


La Plaza Solny o la plaza de la sal, donde se pueden comprar flores las 24 horas del día. Hay unas fachadas de casas monísimas, parecen hechas de galletas decoradas.

                                          

                                         

                                          
                                          

                                          

                                          

                                             Buscando GNOMOS

                                         






                               
                         
                                

                                           Iglesias de Wroclaw

                              

                                        


  


                                      
                              

Ya está oscureciendo y vamos a cenar y descansar.

  

                                         

Coordenadas: N 51.110001
                     E 17.0411


Kilómetros 29.290

16 de agosto Polonia, (Cracovia)

Wroclaw despierta y en el aparcamiento ya se oye el entrar de vehículos dispuestos a ir a sus quehaceres, nosotros hoy dirección Cracovia.

Feli decide destino, un camping, así que ponemos dirección Camping Clepardia, queda un poco lejos del centro así que disponemos de autobús. nº 164 y nº169
El camping cumple con lo necesario y tiene sus sombras, se agradece pues la temperatura en Cracovia es alta.

                 

Justo llegar comemos vamos a investigar la parada del bus y hacer una primera toma de contacto con la ciudad.
Cracovia,
Hermosa y cargada de historia, la ciudad más turística de Polonia y la más económica de Europa.
En su día fue la capital del país, es una ciudad llena de vida y, a su vez, te sumerges en uno de los capítulos más oscuros de la historia del siglo XX. A diferencia de la mayoría de las ciudades polacas, Cracovia conserva un increíble legado arquitectónico, ya que no sufrió daños significativos durante la Segunda Guerra Mundial. Y es que la localidad apenas fue bombardeada por las tropas alemanas.

El autobús nos deja en la parada “Jubilat”, cosa que me hizo mucha gracia ya que a mí me quedan los días contados para mi jubilación y me lo tomé como un cartel anunciador.

                          

Justo llegar vemos el río Vístula desde donde podemos apreciar una preciosa vista de la Colina de Wawel.

                          

                          

Como símbolo tienen una leyenda de un “dragón” que es quien ha protegido la Colina a lo largo de la historia, hoy como atracción se puede acceder a su cueva y ver cómo va echando fuego.
Fuera como fuese, la próspera Cracovia medieval pudo desarrollarse gracias al amparo que ofrecía esta fortaleza de emplazamiento privilegiado. De aquella época se conservan dos monumentos de extraordinario valor: la Catedral de San Estanislao y San Wenceslao y el Castillo de Wawel.








En su extremo sur se puede visitar la Torre de Sandomierz.

   

                               
             

Dimos un buen paseo y a la vez íbamos descendiendo por el otro lado y ya que teníamos cerca el Barrio Judio decidimos hacer visita.
La entrada a Kazimierz no puedo decir que fuese triunfal debido a que las calles están abiertas, literalmente, con unas obras que por lo visto llevan ya mucho tiempo, esto no da ninguna buena imagen del lugar. Nos contaron que al parecer encontraron algunos tesoros y han detenido la construcción. La cuestión es que polvo, vallas, montañas de adoquín, etc etc desluce totalmente el barrio.

Visitamos la Sinagoga Vieja.
La Sinagoga Tempel.
La Iglesia del Corpus Christi.
Cementerios judios.





    





   

Plac Wolnica, es la plaza donde hay más ambiente, multitud de bares y comercios. Hay músicos entonando melodías de carácter judío creando así un ambiente melancólico, la simbología visual también te recuerda el lugar donde estas.
Es conocido el cambio que sufre el barrio al caer la noche, siendo lugar favorito para los amantes de la vida nocturna.

                                           

       

      




Después de lo visto retrocedimos otra vez hacia Wawel y a buscar nuestro autobús.
Suficiente por hoy, mañana nos espera un día intenso.

Camping Clepardia
Coordenadas: N 50.05923
                     E 19.93703

Kilometros 29.569


17 de agosto Polonia (Cracovia)

Día soleado y todo listo para hacer visita completa a la ciudad de Cracovia.
Vamos preparados para pasar calor, el día así lo demuestra.
Buscamos el bus y hasta nuestra parada de “Jubilat”. Desde allí y bordeando Wawel nos dirigimos a la calle Grodzka hacia el centro histórico.

                           

Barbacana, es una puerta histórica que conduce al centro histórico de Cracovia, y la Puerta de San Florián, uno de los accesos principales de la ciudad amurallada, durante la época medieval uno de los pocos vestigios que han llegado a nuestros días.

                              







La calle Florianska, desde donde se aprecian casas señoriales como la casa del Ciervo o la de Jan Mateijo.

                            

                            

La Basílica de Santa María, una verdadera maravilla del gótico europeo. De fachada “coja” sus torres son de distinta altura.






La Plaza del mercado, según dicen es una de las mayores plazas medievales del mundo. Pero lo que la hace importante es el hervidero de gente que la concurre haga frío o calor, siempre hay buen ambiente. 

                                   

La Lonja de Paños, edificio renacentista, hoy en la galería central se han instalado decenas de puestos de venta de recuerdos y artesanía, dimos un par de vueltas, pero habríamos dado muchas más. ¡Qué bonito todo!









                              
                   El Monumento al Poeta nacional Adam Mickiewicz.

                              
                                    La iglesia de San Adalberto
                            
                                   

                                   

La torre del ayuntamiento, donde suena una melodía a toque de trompeta. Es tocada a los cuatro vientos, cada hora en punto y se oye desde buena parte de la ciudad. Se corta de forma repentina como recuerdo en el que dejó de tocarlo el valiente trompetista quien murió al avisar de un ataque de invasores tártaros.

   

El Museo Subterráneo de Rynek, una complicadísima excavación arqueológica para devolver a la luz la ciudad medieval que se había quedado sepultada en el subsuelo. Esta fue una de nuestras frustraciones ya que no pudimos visitarlo pues es necesario sacar entradas con antelación. La verdad es que lo sentimos mucho.

El Collegium Maius, una de las universidades más antiguas donde comenzó a estudiar Nicolás Copérnico.





 






                                   La iglesia de Francisco de Asís.








                           Lugares para el recuerdo de Juan Pablo II


Quiosco típico


                                La iglesia de la Santísima Trinidad.


                              La iglesia de San Pedro y San Pablo.






                                Interior basílica de Santa Maria
                                                                                                                          




                             

                                     Iglesia de Santa Bárbara




                                                Dulces típicos



                                         

                                         

Recorrimos distintas calles admirando rincones, paramos a comer en un italiano, había pizza con opción vegana, muy rica, por cierto.

Dimos otra vuelta a la Lonja de Paños para disfrutar de la inmensa cantidad de ámbar que exponen   

                             
y nos dirigimos hacia Maly Rynek, plaza del pequeño mercado. Esta plaza con fachadas góticas y renacentistas es donde se suelen ubicar ferias gastronómicas.

                                    

                                    

                                     

 Pudimos presenciar el Festival Pierogiun.             
                                                                     
Los pierogis son el equivalente de los ravioles en la Europa del Este. Este plato es originario de Polonia y hay testimonios y recetarios ya del siglo XIII.
Por su tamaño y por la costumbre no se comen de forma individual.
Se trata de una porción pequeña de masa rellena con diferentes ingredientes. La masa se estira y se cortan círculos más o menos de unos 6 centímetros de diámetro. Se rellenan, sellan y se hierven. Por lo general, una vez hervidos se les da un paso por la sartén donde se saltean o fríen en mantequilla o aceite para darles color.
El relleno tradicional de los pierogis incluye puré de patatas, queso, cebollas fritas, carne, setas o repollo. Pero hay rellenos especiales para fiestas típicas. Incluso pueden servirse como postres rellenos de frutas, chocolate o dulces.
Habían puestos uno al lado del otro ofreciendo estas especies de empanadillas en todas las versiones imaginables, hervidas, fritas, rellenas de verdura, de carne de chocolate, es que no se puede imaginar uno si no se ve, aparte que no entiendes nada, solo en su idioma, yo me fijaba en que tenían colores diferentes y luego se aliñaban con unas salsas también a saber de qué eran. Todo muy curioso y encantador.
Me fije en los platos, vasos, cubiertos todo era reciclable, las personas muy limpias respetando el ambiente.

                       

                       

                               

                               

                      

                               

                                
Nosotros comimos un helado para refrescarnos un poco y Núria una manzana cubierta de chocolate. Un buen recuerdo de Cracovia.

                         

Sigo… aquí en esta ciudad las Carmelitas Misioneras congregación a la que he dedicado la mayor parte de mi vida, tienen una comunidad, yo de nombre y por fotos he oído mucho hablar de ellas así que me hacía ilusión poner cara a las hermanas y ver en directo el lugar.
Buscamos información del autobús que nos podía acercar y allá que fuimos.
Las hermanas Bárbara y Lidia con mucho cariño nos abrieron sus puertas y muy amables nos invitaron a café, agua y unas pastas deliciosas. Estuvimos hablando un ratito y vimos la casa donde alquilan a residentes de Erasmus o incluso para hacer visita a la ciudad. La verdad es que lo tienen maravillosamente bien, y la parada del autobús enfrente mismo, quien te acerca al centro en poco rato.
Fui muy feliz de poder conocer la Comunidad.

                          

                                               

Cogimos el bus, hicimos transbordo y muy cansados pero contentos despedimos Cracovia y hacia el camping.
Al llegar fuimos a recepción para preguntar por las Minas de Sal de Wieliczka, ya que era la visita del próximo día, y otra frustración ya que también hay que sacar entradas con antelación. Sentí rabia de no haberlo pensado con anterioridad, pero no podíamos esperar más días ya que nuestro destino eran los Países Bálticos, así que lo dejamos para otra vez, ¡¡¡habrá que volver!!!!!!, podríamos acercarnos en avión y alojarnos en la casa de las hermanas, ¡¡¡hecho!!!!!
Otra excursión muy típica es el campo de exterminio de Auschwitz, yo no voy a ir nunca, siento demasiado dolor visitando ciertos lugares, lo evito si puedo. 

18 de agosto Polonia- Lituania 

Cracovia destino a Vilnius, Lituania             
Hoy día pesado, tenemos que circular unos 800 kilómetros,
las carreteras son buenas en general, pero hay tramos en obras que ralentizan la marcha. Autopistas con semáforos y paradas de autobuses. Un poco especial.
Polonia tiene mejor piso que Lituania.
Al entrar en Lituania vemos que tanto reloj como móviles adelantan una hora, somos tan felices que ni nos habíamos enterado que tienen huso horario diferente.
Los países bálticos se rigen por el huso horario EET, del inglés Eastern European Time, que está 2 horas por delante del Tiempo Universal Coordinado
Vamos pensando si ir a camping o aparcamiento, yo me adelanto y busco un aparcamiento, vigilado por cámaras a un buen precio y cerca del centro, así que vamos hacia allá.
Durante la ruta tuvimos que ir desplazándonos hacia la izquierda ya que nuestro GPS nos hacía cruzar por Bielorrusia, sin visado no quisimos arriesgarnos así que añadimos unos Kilómetros más de ruta. Llegamos a Vilnius ya casi anochecido.
El aparcamiento muy bien, junto a un riachuelo y muy tranquilo.

Coordenadas:    N 54.687
                        E 25.2943
Vilnius, 32K. Skirpos alèja
                      

Kilómetros 30.403

19 de agosto Lituania 

Lituania es la más poblada de las tres repúblicas.
Vilnius es su capital, con una ciudad vieja que es una obra maestra del Barroco.
También hay magníficos bosques y parques nacionales como el Istmo de Curlandia.
Despertador en marcha y a conquistar Vilnius, el Aparcamiento está tocando la Catedral así pues empezamos nuestro recorrido desde aquí.
                     
                           

                                      

Cuando empezamos nuestro paseo parecía que Vilnius estaba despertando, 

                                   

                                   

poca gente y los bares y restaurantes preparaban sus mesas, la ciudad se ponía en marcha, pero esto la hacía aún más bonita, era como si nos preparasen la alfombra roja por donde admirar cada uno de sus edificios y sobre todo iglesias, tanto católicas como ortodoxas. Yo creo que pasamos a visitarlas todas, cada una particular y diferente.
Sus calles, y sobre todo las tiendas del preciado oro báltico, el ámbar. Yo diría que es en la ciudad que hay más y a un precio más razonable, ya que generalmente es caro y si lo encuentras muy barato, plástico seguro. Es muy difícil de reconocer.


           

Lugares interesantes:

                         Arsenal, alberga el Museo Nacional de Lituania.

                                                 
La Catedral y su elegante campanario.

                                         

 



Baldosa en donde pides un deseo mientras das vueltas


                                             Misión cumplida

                                          Torre de Gedeminas.

                                       

                     Iglesia de Santa Ana y Monasterio de San Bernardino.







Iglesia de San Nicolas.





Iglesia de San Paraskeva



      Iglesia de San Casimiro inconfundible por sus paredes color salmón.







                                       Plaza del ayuntamiento.



                              Iglesia Ortodoxa del Espíritu Santo.







                               Iglesia de San Pedro y San Pablo.

                                         


                                Iglesia de Santa Madre de Dios.





Calle Pilies gatve


Barrio Uzupis, 
famoso barrio por ser una república independiente de artistas, tienen su propio himno y Constitución.




                                          Iglesia de Santa Teresa








                                             Puerta del amanecer.

 







                                         Ángel de Bronze de Uzupis.

                                           

                                          Colina de las Tres Cruces

                                   

Después de un gran paseo llegamos al aparcamiento y comimos, planificando la tarde, de ese modo aprovecharíamos las horas que quedaban.

Dirección                        Castillo de Trakai

                                

Trakai es la excursión más atractiva en los alrededores de Vilnius gracias a su castillo idílicamente situado en el centro de un lago.
Trakai fue capital de Lituania en la época medieval después se transfirió a Vilnius pero siguió siendo la residencia de los Grandes Duques.
Durante las guerras fue destruido y posteriormente reconstruido, buen lugar para admirar su museo que ayuda a entender la evolución del país.









Regresamos a la autocaravana y destino la Colina de las cruces.

Es una colina completamente recubierta de cruces de todas las formas, tamaños, materiales… es uno de los lugares más importantes para la nación lituana por su simbolismo.
En Lituania la tradición de hacer cruces viene practicándose desde hace siglos. Las cruces tienen varios propósitos como destacar acontecimientos importantes de la vida o conmemorar fechas significativas.
Durante los años de la Unión Soviética, se prohibió la construcción de cruces, pero siguieron levantando en secreto, convirtiéndose en símbolo nacional y de resistencia.
Esta colina es importante por el papel de resistencia cuando las autoridades destruyeron las cruces, en tres ocasiones, al día siguiente eran vueltas a plantar. Hoy en día hay más de 200.000 cruces.
Nosotros llegamos ya anocheciendo, después de una maravillosa puesta de sol, que nos dejó un cielo espectacular,




fue aparcar y correr para poder ver aquel misterioso lugar con aquella iluminación, realmente siniestra, nuestra hija no pudo más que decir, vayámonos que esto me hace “iuiu”, mucho “iuiu”. Expresión suave pienso yo.
Nos quedamos a dormir en el aparcamiento de arriba donde se pueden ver el apuntar de algunas cruces, solo se oía el cantar de las cigüeñas que observaban atentamente el lugar y pienso yo que se dieron un festín comiendo mosquitos ya que había un montón, eran molestos picaban, pero no hacían reacción como nuestros “tigre”.


Yo descanse tranquila, porque sabía que eran cruces, símbolos, la mayoría de agradecimiento y no era lugar de entierros. Pero si, repito, impresionaba.









La Colina de las cruces situada al norte de Siaulai,

Coordenadas: N 56.017880
                     E 23.419660
Kilómetros 30.707


20 de agosto Lituania, Klaipéda, Istmo de Curlandia, Palanga.

Despertamos bajo un sol radiante pero muy buena temperatura, una brisa fresca que hace muy soportable el sol .
Desayunamos y vamos a pasear por La colina con una luz muy diferente, fuimos casi los primeros, subimos y bajamos por los estrechos pasillos, viendo con curiosidad la infinidad de cruces que hay, una en forma de hélice, otra hecha de piezas de lego, otra de ganchillo, de hierro forjado, de madera infinidad.
Lástima que no lo sabía porque habría hecho una a crochet, en agradecimiento a nuestros recorridos con la autocaravana. Si Dios quiere y vuelvo haré una y la colgaré. Dimos unas vueltas, la sensación impactante perdura y regresamos a la autocaravana.











Pensé que raro no haya un puesto de cruces para comprar y plantar. Pues al coger la carretera, en el primer Aparcamiento ya vi un toldico sin duda un puesto ambulante. El negocio es el negocio. Jajaja.

Siguiente destino el mar Báltico, Klaipéda.
Klaipėda es una ciudad portuaria de Lituania, podríamos decir que es el punto de partida hacia el Istmo de Curlandia.
Este istmo de 50 kilómetros de longitud está dividido entre Lituania y Rusia. La mezcla de dunas, bosques y lagunas lo convierten en uno de los lugares más mágicos de la región.
La localidad más importante es Nida, un pueblecito encantador abarrotado de turistas en verano.
Se puede hacer senderismo, o pasear en bicicleta. Circulando en coche hay poca visibilidad hacia el mar, ya que el bosque obstaculiza las vistas.
Para acceder al Istmo tuvimos que coger un ferry transbordador, 24 euros ida y vuelta.
Ya sobre el terreno una garita de peaje nos cobró 30 euros por entrar al Parque nacional, lo encontré un abuso, y aquí no queda todo, para acceder a las dunas y paisajes más bonitos también tienes que pagar.
Buscamos una playa donde poder pisar las arenas blanquecinas y poner los pies en las aguas negruzcas y frías del báltico, hicimos fotos, nos refrescamos y sobre todo nos reímos a gusto.
Disfrutamos del paisaje, por un lado, el lago, por otro el mar abierto y regresamos al ferry que nos cruzó al otro lado.

                            

                            

 













Pusimos destino Palanga, Lituania, ya que es lugar ideal para ver una puesta de sol.
Palanga es la capital veraniega de Lituania, para definir la población diría que es el vivo retrato de Playa de aro, en nuestra querida Costa brava.
Una gran avenida repleta de restaurantes, con jardines, preciosas flores, puestos de helados, músicos, actividades para los más pequeños, puestos de artesanía, baile en los restaurantes, tiendas de ropa, un ambiente estupendo, todos bien vestidos y el camino se dirige hacia el mar, una poquita cuesta y ya en la cima un montón de bancos, como si de un cine se tratara y todos esperando la proyección. Sin duda ya todos ocupados, todo el mundo mirando el mar, un largo puente sobre el agua y una multitud se va apostando sobre él para despedir al sol que ya va acercándose al mar.
La verdad no fue una bonita puesta, había nubes, ocultaban el sol y no veíamos los colores deseados, a mí me dio rabia pero a la gente que allí esperaba parecía no importarles, bien abrigaditos ya que corría un "mirujillo" y ahí con sus helados esperando el anochecer.
Teníamos el vehículo en un aparcamiento, solo de día, así que decidimos hacer noche en un camping a las afueras de la ciudad.




                           

                           

                           


                                      






Palangos Kempingas Compensa
Coordenadas: N 55.87644
                     E 21.06609


Kilometros 31.005


21 de agosto Lituania, (Palanga), Letonia, (Liepaja), (Riga)

                                   
Despertamos en el camping de Palanga, Lituania, noche muy tranquila, vaciamos, llenamos y dirección al Museo del Ámbar, me hacía ilusión entender el proceso de esta preciada resina. En el museo hay una gran colección de piezas de este material, expuestas en un bello palacete del siglo XIX.
Creímos interesante hacer la visita puesto que estos países giran en torno a este material fosilizado, la resina, la verdad lo encontré muy positivo, tanto por la exposición, presentación como por las explicaciones.
El trayecto hasta llegar al museo es de gran belleza ya que se atraviesan unos preciosos jardines muy bien cuidados donde se respiraba mucha paz y tranquilidad.








 



 




Al salir nos dirigimos hacia Letonia, haciendo parada en Liepaja, una ciudad sin mucho encanto, famosa por su panorama musical, el rock está presente en toda la ciudad, hay multitud de locales para escuchar conciertos de bandas musicales.
Pero a mí lo que me interesaba era llegar al suburbio de Karosta para poder visitar la grandiosa catedral de San Nicolas.





Realmente impresionante e impactante ya que cuando miras a tu alrededor puedes imaginar la vida en el periodo soviético mientras la catedral ortodoxa se alza en todo su esplendor. Preciosa, reconozco que tengo debilidad por estas construcciones.




Para acceder al barrio tuvimos que esperar a que abrieran un gran puente sobre el río Trave, por el que circulaban grandes barcos, Liepaja fue base naval en el periodo zarista y también el soviético.




Mientras esperábamos aprovechamos para comer.
Otra vez en marcha y dirección Riga, Feli toma la decisión de aparcar en Riga City, un camping cerca de la ciudad, siente mayor seguridad.

Coordenadas: N 56.95471
                     E 24.08177


kilómetros 31.318

22 de agosto Letonia,(Riga)

                                       
Despertamos en el camping Riga City, según dicen el camping es muy céntrico. Desayunamos, disfrutamos de las duchas y dispuestos a conquistar la ciudad.
Emprendemos el camino hacia la ciudad, cerca, lo que se dice cerca, no está, pero se puede ir andando y saboreando unas buenas vistas al bordear el El río Daugava, vimos grandes barcos amarrados, cruzamos el laaaargo puente, los patinetes y bicicletas nos iban sorteando, hasta que llegamos al casco histórico.




Justo al llegar nos encontramos con el Castillo, sus soldados y cambio de guardia, una clásica ceremonia.

                                                                              
                                        

Riga es una población cosmopolita, formada por letones, rusos, polacos y ucranianos.
Adentrándonos en el casco antiguo pudimos ver cantidad de callejuelas desde donde se alzan majestuosas iglesias, catedrales y ricas mansiones de antiguos comerciantes.
Y sobre todo lo que más me sorprendió fue la gran colección de edificios “Art Nouveau“ quienes se alzan alrededor de la ciudad, protagonizando un gran ejemplo de este movimiento artístico.


                                                                                               






A medida que avanzamos llegamos a la Plaza de la catedral, hay mucho por ver y nos detenemos para ir asimilando.



                                      


Una compañera mía al ver mi Instagram, donde voy subiendo nuestro recorrido, me dijo que su hija estaba por los Países bálticos y el día anterior había estado en Riga, y a modo de broma me dijo, “ojalá os encontréis”. ¡Y la cosa quedó así, hubo quien dijo, bueno sería que coincidierais!
Bueno volvemos a situarnos en la Plaza de la catedral, y yo digo mirad en aquella calle veo un edificio color verde que parece interesante, vamos no sea que nos desorientemos y pierda la foto. Pues bien, me sitúo enfrente del edificio y pasan 3 jóvenes hablando en catalán, ¡¡¡¡¡miro y digo Xenia!!!!! ¡Vaya casualidad! Y sin llamarnos ni quedar, ellos iban con prisa, sacamos foto y la verdad una buena anécdota, para asegurar que el mundo es un pañuelo.

                                       

Seguimos, visitando
                                       La Iglesia de San Pedro

   


                                          

                                                  La Plaza Livu


                                            El museo de Arte



                                        La torre de la pólvora


                                           La iglesia de San Juan

                              

                                            El pequeño gremio

                             

                                                 El gran gremio


  





La casa del gato, llamada así por los dos gatos negros que hay en lo alto de sus torres. Se dice que su propietario pidió ser admitido en el Gran Gremio, justo en el otro lado de la calle, pero su solicitud fue rechazada.
El airado comerciante ordenó que se pusieran dos gatos en lo alto del edificio enfocando sus traseros al edificio del Gran Gremio para mostrar su enfado. El asunto causó gran escándalo en la ciudad, así que, el comerciante fue admitido y los gatos fueron cambiados de posición.





Yo que soy amante de los gatos fotografié el edificio por todos los lados.
La Puerta sueca, en una calle muy bonita y junto a lo que queda de murallas.




Los barracones de Jacobo, edificio cuya misión fue albergar las tropas que defendían la ciudad.


Tres hermanos, son las casas residenciales más antiguas, la nº17 es la más antigua tiene más de 600años.






















Enfrente de las casas, lugar donde infinidad de grupos se detienen para sacar fotos, había dos músicos trompetistas, en cuanto veían un grupo, según fuere su País entonaban alguna melodía típica, la cuestión es que todos acababan cantando o tarareando. Si eran españoles, entonaban “El toro enamorado de la luna,” y “Clavelitos”, y así depende del país una adaptación, sentimientos removidos y bote de las propinas cada vez más lleno. La verdad es que tocaban muy bien.

                              

Plaza del ayuntamiento, sin duda el emblema de la plaza es la casa de las Cabezas Negras, lugar utilizado por los comerciantes, hombres, solteros, y que venían a descansar. Cada uno lo puede interpretar a su manera. Todo está reconstruido ya que no quedo nada después de la guerra.

                              





                                      

En mitad de la plaza esta la estatua de Roland, sobrino de Carlomagno.

                                     
                                      
                                
La comida la hicimos en un restaurante donde si había opción vegana, comimos bien y muy económico.
                        
Edificios Art Nouveau, dignos de admirar, todos tienen un algo que te sorprende.
















Ya bastante cansados emprendemos la marcha hacia el puente Vansu Tilts,


el trayecto se hace largo, aunque mirando a nuestro alrededor y viendo todos los edificios modernos, barcos, el crucero que eleva anclas para zarpar, los patinetes, las bicicletas esto va entreteniendo.

                           

                                      
                                                                                                    
Al llegar a la otra orilla vemos un Rimi, supermercado, entramos a reponer frutas y verduras para proseguir nuestro viaje.

Llegamos al camping bien cansados.
Duchas, cenas, preparación viaje del día siguiente y a descansar.


23 de agosto Estonia, (Tallin)



Despertamos en el camping de Riga, vaciamos, llenamos, pagamos 60 euros, 30 euros por noche y nos dirigimos hacia Estonia.

Estonia:
La más norteña de las tres repúblicas bálticas, vemos bonitos paisajes costeros, idílicos lagos envueltos de bosques interminables y pueblos con encanto. Un aire escandinavo se respira en este país.

                                     
Llegamos a Tallin con amenaza de lluvia, el tiempo ya lo había predicho, aparcamos en área de pernocta, un aparcamiento muy céntrico justo debajo de la iglesia de San Olaf.

                                     


comimos y equipados con paraguas y chubasquero salimos hacia la ciudad.
Esta ciudad parece salida de un cuento de hadas pero que en el momento que giras la cabeza te encuentras con unos edificios muy modernos y muy integrados en el barrio antiguo.
Entramos por la Puerta Viru

                                                  Puerta Viru

                                       

                                       

y nos dirigimos a visitar el Callejón de Santa Catalina, bastante vacío ya que ya empieza a llover,

                                     

esto no nos detiene, así que decidimos entrar a visitar el Monasterio Dominico, la iglesia y el claustro de Santa Catalina, destruido por los luteranos, pero impresionante lo que ha quedado como museo, el patio del claustro muy bonito.
                                                                                                       
                  Monasterio dominico y la iglesia y claustro de Santa Catalina.













Como la lluvia va aumentando decidimos regresar a la autocaravana a pasar la tarde y mañana sábado con buen tiempo, visitar la ciudad al completo.

Pasamos la tarde cada uno con sus tareas. Feli viendo una peli, Núria preparando guisos para unos días y yo ganchillo en mano, crochet y más crochet.






Buena tarde para compensar la lluvia.

Coordenadas:  N 59.441402
                              E 24.751410


Kilómetros 31.629

24 de agosto Estonia, (Tallin) Letonia, (Vitrupe)

Hoy despertamos con un día fresco y soleado, buena decisión al quedarnos un día más para así poder ver la ciudad con buena iluminación.
Un buen desayuno para tener mucha energía ya que habrá que caminar bastante para poder recorrer Tallin.
Desde nuestro aparcamiento tenemos muy cercano el casco histórico.
Repetimos la entrada por la Puerta Viru,

                             

maravillosa entrada ya que a la izquierda todo son puestos de flores que entre el colorido y los olores ofrecen una preciosa invitación a recorrer la ciudad.

                              












Una vez dentro giramos hacia Müürivahe, callejón que discurre al lado de la vieja muralla.

                                      

A continuación, encontramos el famoso pasaje de Santa Catalina, callejuela repleta de puestos de artesanía y sobre todo de multitud de grupos de turistas. Como leímos lo difícil que es hacer buena foto sin personal fuimos a visitarla lo primero, parecía que todavía estaban poniendo la calle, eso nos permitió hacer magnificas fotos sin apenas transeúntes, mucha satisfacción por nuestra parte.



                                                        
                                    
Seguimos hacia la plaza del Ayuntamiento, repleta de puestos donde encontrar objetos de madera o gorros y bufandas de lana, ¡que si pica! se iba llenando por momentos, grupos y más grupos de turistas aparecían por todas las esquinas.









La iglesia del Espíritu Santo de fachada escalonada con un precioso reloj en tonos azules y dorados.





          
          


Tomamos la calle Pikk, posiblemente la más bonita de la ciudad con un montón de antiguas casas,


  


    



   

seguimos la calle hasta acabar en la torre conocida como La Gorda Margarita.

                                           

La grandiosa iglesia de San Olaf preside la ciudad, no pudimos entrar puesto que está en obras, cuenta con el campanario más alto de la ciudad.






















Subimos a la colina Toompea o la ciudad alta
Aquí se construyó la fortaleza, se pueden apreciar muy bien las murallas.
                           
                                     

Nos encontramos El Castillo de Troompea que destaca por ser de color rosa en la parte principal y por el resto totalmente medieval. Hoy en día sede del Parlamento de Estonia.



Gracias a su privilegiada posición en la colina hay varios miradores desde donde pudimos contemplar preciosas vistas de la ciudad.

                               Miradores de Kohtuosta y Patkuli.

                                  

                                  

Frente al castillo se alza la Catedral Alexander Nevky, de estilo neo-bizantino, típicamente rusa, yo siento pasión por las construcciones empleadas en las iglesias ortodoxas así que pude admirar lo maravillosa que es no obstante el pueblo estonio no la tienen en gran estima. Demasiados recuerdos.

                                         


                             Iglesia de la Cúpula o de Santa Maria

También en la parte alta de la ciudad, encontramos una de las iglesias mas antiguas de estonia.





Encontramos interesante visitar una de las Farmacias más antiguas de Europa, se sigue vendiendo en ella, pero se puede admirar el pasado del negocio. 


                                             



                                       Casa del mazapán.
Como producto típico tenemos el mazapán, indudablemente el ámbar preside todas las tiendas de regalos y también la madera, todo tipo de utensilios, principalmente unos pequeños para untar la mantequilla, muy utilizada en estos países.
                           

                                     

El casco antiguo de Tallin es uno de los ejemplos de arquitectura medieval mejor conservados del norte de Europa. Calles adoquinadas, serpenteantes calles, fortificaciones medievales, y sus habitantes mantienen la ciudad cuidando todos los rincones, con flores, decoraciones incluso atuendos de la época. Realmente te trasladas en la história.

                                          Iglesia de San Nicolas




       

                                     Casa de las cabezas negras


    

                                            Celdas del KGB



                                        Torre Helleman y muralla



                                           El Callejón Saiakang



                                      Entrada al Museo Marítimo




Paramos a comer en un céntrico restaurante con opción vegana. No fue fácil ya que al ser una ciudad con visión medieval lo que predomina son los asados de carnes. Comimos bien con camareras vestidas de la época, decoración propia, incluso los WC estaban ambientados.



Dejamos la ciudad saliendo otra vez por la puerta Viru, las flores desprendían aún más olor, parecía que nos despedían y a su vez nos invitaban para regresar en un próximo viaje.






Paramos en un Rimi, supermercado a comprar la pizza de hoy sábado y algo de fruta.

                                      


Llegamos a la autocaravana y emprendemos la marcha ya de vuelta, con intención de detenernos en una playa, así despedimos el mar Báltico con una bonita puesta de sol.
Dejamos Estonia y justo entrar en Letonia paramos en Vitrupe un aparcamiento justo a pie de la playa.




Hoy si vemos caer el sol, disfrutamos haciendo fotos y vamos a cenar y descansar.

                           


                              

                           

Coordenadas: N 57.637433
                     E 24375614

Kilómetros 31.847

25 de agosto Letonia, Lituania, Polonia

Playa de Vitrupe, Letonia, 
Suena el despertador como cada día, la noche ha sido tranquila acompañándonos el suave sonido del mar. Amanece un día soleado, salimos a hacer unas fotos para ver una iluminación diferente.
Emprendemos la marcha pues hoy nos esperan muchos kilómetros por delante.

El trayecto se hace ligero, la mayoría de camiones están aparcados en las gasolineras sin poder circular, imagino que al ser domingo lo tienen prohibido.
Vamos avanzando y cambiando de país, dejamos Letonia, dejamos Lituania y entramos a Polonia, nuestros relojes vuelven a la hora, una hora menos, y ya cerca de Varsovia vemos un coche de policía, un agente nos hace una ligera señal y nos detenemos. El señor nos mira y remira las luces, nos toma por estones, encuentro horrible que un agente de la ley no distinga una matrícula estona a una española. Nos pide documentación del vehículo, del conductor y se va hacia su coche, tarda un buen rato, vuelve con una gran sonrisa, saca una libretita, anota nombre y dirección y nos desea un feliz viaje de vuelta a casa.
¿¿¿¿¿Cómo nos quedamos.???????? ¿¿¿¿Nos habrá sancionado???? ¿¿¿¿Por qué motivo???? ¿¿¿¿Simple inspección???? ¿¿¿¿Buscaba algo???? ¿¿¿¿¿Estadística????? En fin, todo pasó por nuestras cabezas, a mi me temblaban las piernas, veremos si en unos días no nos llega alguna notificación.
Cruzar Varsovia fue muy complicado, muchísimo tráfico, imagino que al ser domingo regresaban a la capital, decidimos buscar un aparcamiento pasado la gran ciudad y hacer noche.

Arkadia, aparcamiento

                                        


Coordenadas: N 52.087509
                     E 20.013083

Kms 32.702


26 de agosto, viaje, Alemania

Suena el despertador a las 7, noche tranquila pero con un poco de calor, la verdad ya habíamos perdido la costumbre de sudar por las noches.
Hoy día soleado preparados para hacer muchos kilómetros y sudar.
Las carreteras muy llenas, la circulación lenta, nos encontramos un helicóptero en medio de la autopista, nos desviaron pero sin ruta alternativa, suerte del GPS, un verdadero "caos", perdimos mucho tiempo y avanzamos lentamente.

Paramos a hacer noche en una gasolinera a unos 100 kilómetros de Núremberg


Kilómetros 33.470

   27 de agosto, viaje, Francia

Despertamos a las 7 desayunamos y carretera, no tardó el sol a anunciar calor, llegamos a los 38 grados en cabina, obras, retenciones, atrasos, y, calor, este seria el resumen del viaje.
Bastante cansados buscamos un aparcamiento pero que fuese después de cruzar Lyon de este modo ya nos quitábamos una gran ciudad por atravesar.
Paramos en Saint-Cyr-sur-le-Rhone, un espacio verde junto al río, muy tranquilo y con unos cisnes muy listos que solo con verme ya pensaron que tenían la cena lista. 
Yo sin dudarlo me puse chancletas y ¡pies al agua! super calmante para unas piernas con muchos kilómetros encima y mucho calor, así que compartimos espacio los cisnes y yo, la verdad es que uno de ellos imponía pues daba algún que otro soplido pero con trocitos de pan nos hicimos muy amigos.
!Ah! Y en el auto la ducha asegurada después de compartir bañito con cisnes una buena desinfección, sentía un poco de "asquirrin". Ja ja ja.

Cumelle, cerca de Vienne




Coordenadas: N 45.5121
                     E 4.85302

Kilómetros 34.406 (hoy ruta larga, 936 kms) buf, buf               


28 de agosto, viaje.


Despertador como cada día, empezar a recoger, ropa para lavar, ir llenando bolsas de este modo el vaciado al llegar a casa se hace mas llevadero.
Antes de arrancar veo los cisnes que me están esperando, querían su desayuno 
así que no podía irme sin antes despedirlos, me acerque y repartí un poco mas de pan, las vistas muy bonitas así que queda anotado este aparcamiento por si algún otro día coincidimos.

Nos ponemos en marcha hacia casita.

Momentos del viaje



           
                                    

Paramos a comer en Área de servicio Empordá

Kilómetros 34.082

Total 6.877 Kilómetros